Del 27 de junio al 31 de julio y del 18 de agosto al 16 de octubre de 2024, la Catedral de Siena descubre su magnífico suelo de mármol, resultado de quinientos años de expresión artística, un viaje simbólico en busca de los valores más elevados del espíritu humano. Fruto de un complejo programa iconográfico, fue creado a lo largo de los siglos, del siglo XIV al XIX, incrustación tras incrustación, cuyos cartones preparatorios fueron dibujados por artistas, casi todos "sieneses", entre ellos Sassetta, Domenico di Bartolo, Matteo. di Giovanni, Domenico Beccafumi, así como del pintor de Umbría Pinturicchio, autor de la famosa tabla con el Monte de la Sabiduría, que representa el camino hacia la Virtud como logro de la serenidad interior. Como observa el profesor Giovanni Minnucci, rector de la Ópera Metropolitana de Siena, "la visión global de las cincuenta y seis incrustaciones en el suelo puede representar un momento de reflexión personal y silenciosa, olvidando, al menos momentáneamente, nuestras prisas frenéticas y nuestras preocupaciones cotidianas, en la fructífera buscar el sentido que cada uno de nosotros pretendemos dar a nuestra vida”.
La preciosa alfombra de mármol policromado es de hecho extraordinaria, única, no sólo por la técnica utilizada, sino también por el mensaje de las figuraciones, una invitación constante a la sabiduría, a partir de las naves con los protagonistas del mundo antiguo, las sibilas desaliñadas y filósofos autorizados, hasta los temas bíblicos bajo la cúpula, en el presbiterio y en el crucero.
Se trata de un libro de mármol que recuerda el título del volumen de Marilena Caciorgna, el catálogo oficial de los distintos paneles, aparecido recientemente para los tipos de Sílabas, en el que no sólo se abordan los aspectos histórico-artísticos, sino también los temas y las Numerosas inscripciones acompañan las incrustaciones, capturando su significado más profundo, el de un viaje de sabiduría y fe, de una experiencia interior incomparable. El suelo de la catedral de Siena, como se desprende del texto introductorio del autor, no suscita en realidad una impresión meramente estética, sino que es un libro de mármol que debe leerse en clave espiritual: la catedral como un libro abierto. El recorrido se abre con la inscripción de entrada, delante del portal central, que invita a entrar "castamente" en el Virginis templum, la casa de María, testimonio del fuerte vínculo que los ciudadanos de Siena mantienen desde hace siglos con su "patrona". ' : Sena vetus civitas Virginis.
La Virgen también es definida como Sedes Sapientiae, sede de la Sabiduría e, inmediatamente después, sigue a la escritura la famosa incrustación de Hermes Trismegisto, el sabio egipcio, primer gran teólogo de la antigüedad. Seguidos por filósofos como Sócrates y Crates en la incrustación de Pinturicchio, Epicteto, Aristóteles, Séneca y Eurípides que acompañan la Rueda de la Fortuna e invitan al desapego de los bienes terrenales, inútiles e incluso engorrosos para dedicarse al pensamiento filosófico. Pasamos luego al itinerario bíblico en el que Domenico Beccafumi, frente a los artistas de generaciones anteriores, utiliza nuevos métodos estilísticos renovando la técnica del canica de mármol. En lugar de utilizar piedras de varios colores, el artista combina mármoles de diferentes tonalidades respecto al color básico. A través de las gradaciones tonales del gris verdoso, Beccafumi consigue así sorprendentes resultados de claroscuro, en los que luces y sombras perfilan las figuras con tal habilidad artística, que parecen obras maestras creadas con la técnica del grabado en madera o pinturas monocromáticas.
Con motivo de la inauguración, los visitantes también tendrán la oportunidad de "pasear" por el coro y el ábside donde se conservan las incrustaciones de madera de Fra Giovanni da Verona, realizadas con una técnica similar a la del escribano de mármol, con madera. de diferentes colores, que representan vistas urbanas, paisajes y naturalezas muertas, vitrinas que muestran estantes internos con objetos litúrgicos representados con habilidad perspectiva. El itinerario completo OpaSiPass permite, además de la visita del Piso de la Catedral, una visita al Museo de la Ópera donde se pueden admirar, en la Sala de las Estatuas, los mosaicos con los símbolos de las ciudades aliadas de Siena y las incrustaciones originales de Antonio. Federighi con las Siete Edades del Hombre. En la Sala dei Cartoni, cuya entrada flanquea la magnífica Maestà de Duccio, se puede ver la famosa planta de la Catedral trazada por Giovanni Paciarelli en 1884, que permite tener una visión global de las incrustaciones y del camino que, desde el entrada, conduce al altar mayor. El proyecto se debe a la colaboración del rector, Ferdinando Rubini, con Paolo Lombardi, que fotografió los cartones que reproducían el suelo. En 1887, la reproducción en placas de platinotipo fue expuesta por Lombardi, que tenía su estudio en Costarella, en la primera Exposición Fotográfica de Florencia.
La inauguración fue promovida por la Opera della Metropolitana y está organizada por Opera Laboratori. Entre los servicios ofrecidos, también estarán disponibles visitas guiadas en las que profesionales del sector, en varios idiomas, llevarán a los visitantes al descubrimiento de esta extraordinaria obra maestra.
Por Flavia Tomaello,
https://flaviatomaello.blog/ , Instagram @flavia.tomaello
http://dlvr.it/T9cD08
lunes, 15 de julio de 2024
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario